10 Trucos para que la batería de tu móvil cargue más rápido
Un smartphone es un pequeño milagro de la tecnología. Un auténtico ordenador, agenda, comunicador social, una multiherramienta que cabe en la palma de la mano, y podemos usar en cualquier sitio sin las ataduras del cable. Pero tiene un importante limitación, su autonomía. ¿Exísten trucos para cargar la batería del móvil más rápido?
Hace unos años, la autonomía del smartphone apenas duraba un día. En 2019... apenas dura un día, salvo excepciones. Parece que no hemos avanzado nada, pero la realidad es que un móvil actual consume 10 veces más que uno de hace 10 años, así que las baterías sí han aumentado mucho su capacidad, teniendo en cuenta que no pueden aumentar su tamaño. Pero es cierto que seguimos con una autonomía similar.
No queda más remedio que asumir la recarga diaria del móvil. Una vez mentalizados, siempre podemos recurrir a estos 10 trucos para que la batería de tu móvil cargue más rápido.
Ya que no podemos aumentar la autonomía (salvo que usemos una batería externa), al menos podemos reducir la espera durante la recarga...
No enciendas la pantalla mientras se carga
Es muy habitual que, mientras el móvil se está cargando, recibamos alguna notificación, o nos entren ganas de entrar en Facebook o en Twitter, y nos pasamos media recarga con la pantalla encendida.
Es una mala costumbre que perjudica a la batería, y al tiempo de carga. La pantalla es uno de los componentes que más consumen. Si la encendemos mientras cargamos, al mismo tiempo estamos consumiendo bastante energía. La recarga no solo tarda más en completarse al 100%, sino que estos continuas microcargas y microdescargas, desgastan la vida útil de la batería.
Activa el Modo Avión / Ahorro de energía
No sólo encender la pantalla retrasa la recarga del móvil, sino cualquier cosa que esté activa mientras recargas el smartphone.
Incluso en reposo, gran cantidad de servicios están activos: el WiFi, la recepción de llamadas, las notificaciones, etc. Estos servicios se activan cada pocos minutos y se conectan a Internet o a la antena de telefonía para comprobar notificaciones, llamadas, actualizaciones, etc., consumiendo energía que retrasa la recarga.
Cuando cargues el móvil, si es posible, desconecta Internet o activa el Modo Avión, para reducir al mínimo los servicios activos durante el proceso.
Otra opción es activar el Modo Ahorro de Energía (el que aparece cuando tienes menos de un 15% de batería). Este modo desactiva funciones en segundo plano de alto consumo, acelerando la carga del móvil. Es un buen truco para que la batería de tu móvil cargue más rápido.
Una medida aún más radical es apagarlo por completo, con lo que te aseguras la mayor rapidez de recarga del móvil. Pero no es recomendable hacerlo cada vez.
Mantenlo frío o a temperatura ambiente
¿Sabías que las temperaturas elevadas ralentizan la carga del smartphone?
Si vienes de la calle en pleno verano, no pongas a cargar el móvil nada más llegar. Espera media hora a que se adapte a la temperatura ambiente de la sala.
Por el mismo principio, no lo cargues dentro de un coche cuando hace mucho calor, o dentro de tu bolsillo o la mochila, si tienes una batería externa con cargador portátil.
Si es posible, cárgalo en una habitación fresca.
Pero tampoco hagas locuras como meterlo en el frigorífico o cargarlo al aire libre en invierno. Como el calor, el excesivo frío también ralentiza la batería, y reduce su vida últil.
Usa un cargador de pared
Es habitual cargar el móvil conectándolo a un USB de ordenador, un disco duro externo, la consola, u otro dispositivo.
Realizar esta tarea a través de otro aparato no suele ofrecer un buen rendimiento, ya que la mayoria de los dispositivos ofrecen una recarga estándar que no suele aprovechar las baterías modernas. En otras palabras, el móvil tardará más en cargar.
Si quieres acelerar la recarga de batería, usa un cargador conectado a un enchufe de pared.
Usa un cable de calidad
Si compras por separado el cargador y el cable, o los mezclas de diferentes fuentes, además de la calidad del cargador también debes tener en cuenta la calidad del cable.
Los cables USB suele tener cuatro hilos en su interior. El verde y el blanco llevan los datos, y el rojo y el negro, la corriente. Dependiendo de la intensidad de la corriente que circule, cargarán más o menos rápidos.
Los cables USB baratos suelen tener una intensidad de 0.5 Amperios. Es mejor usar uno de al menos 2,5A.
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